20/11/2015
La compañía aérea Vueling ha bautizado uno de sus aviones con el nombre de Miguel Ángel Galán, presidente del Centro de Entrenadores de Fútbol que hace unos meses contrató a Osama Abdul Mohsen, el refugiado sirio cuya imagen dio la vuelta al mundo cuando fue zancadilleado por una periodista húngara en su huida del horror de la guerra que asola su país.
Galán, al conocer la historia y que Osama es entrenador de fútbol, decidió ofrecerle un contrato de trabajo que permitió al refugiado asentarse en España junto a su familia. Y esta historia ha sido premiada por Vueling con el bautismo de uno de sus aviones con el nombre del presidente del centro de entrenadores.
Esta acción se enmarca dentro de la campaña “Historias que merecen un avión” y que Vueling ha puesto en marcha para distinguir a esos héroes anónimos que, sin necesidad alguna, realizan algún gesto destacado en ayuda de sus semejantes.